Los animales pueden parecernos hermosos,
pero como se mencionaba en algún artículo publicado en TODO ANIMAL, una de las
claves para elegir al mejor animal de compañía, tanto para nosotros mismos como
para los niños, es revisar que la energía y actividad del animal sean
compatibles con las de la familia que lo adoptará y particularmente con quien
será el responsable principal.
Esto lo viví hace un par de semanas, cuando
me encontraba en una Plaza Comercial y entre en una popular tienda de animales,
mucho se dice sobre los malos cuidados que les tienen a los ejemplares, pero en
realidad los chicos están al pendiente de sus necesidades, lo malo es que hay
ejemplares que se alteran mucho al ver tanta gente como podrían ser algunas
aves.
En efecto un aparador no es lugar para un
animal, y como bien dicen no se deberían comercializar, pero por el momento así
es y seguirá siendo hasta que no cambie la ley para priorizar las adopciones.
Total fui a investigar la realidad de los
animales, y vi a un Doberman Pinscher miniatura, la verdad es que lo vi muy
grande para ser una raza miniatura, pero muy pequeño para ser del tamaño
normal, en fin era precioso, juguetón y un poco abusivo con su compañero de
aparador, un Chihuahua.
Busque a una de las vendedoras para pedir
más datos sobre el pequeño cachorro y me lo prestó para conocerlo un poco más,
y enseguida fue a buscar los papeles del can para resolver todas mis dudas,
pues le pregunté mucho más de lo que hace la mayoría de la gente.
Ella parecía saber el tamaño que
alcanzaría, el precio y que era juguetón, pero solo eso.
En cuanto tuve al pequeño en mis manos,
pensé que lo tiraría, saltaba como un pescadito y se resbalaba como tal, así
que pase a una micro zona que tienen en la tienda para dejar a los animales
moverse a su antojo, pero sin riesgo de que escapen.
El perrito seguía brincando, y trepó de un
salto a una banquita que medía el sobre de su estatura.
Pensé, “es muy ágil y con la energía muy
elevada, es un loco”. Y en efecto es un loco, incluso cuando no lograba hacer
lo que quería, seguía intentándolo aunque se cayera, parecían no dolerle las
caídas, hasta maromeras daba, de los brincos que pegaba.
El perrito quería subir a mis piernas pero
si se sentía limitado entre mis manos, me mordía, me araño las manos con sus
dientes.
Ese comportamiento me dio mucha más
información que la hoja con su expediente y lo que la vendedora pudo decirme.
El perro necesita ser un el único en la
casa, adiestramiento de obediencia, un responsable que pueda correr entre 3 y 5
km al día para empezar, y luego tal vez más. Un excelente ejemplar para recibir
clases de guardia y protección, es todo un fierito, que bien encaminado y
correctamente tratado puede defender a su familia humana y ser el “hijo ideal”.
Algunos
vendedores ignoran cosas básicas
En mi casa viven cinco perros, y le
pregunté a la vendedora si el pequeño pinscher podría convivir con ellos, que
ya son adultos y de talla mediana.
Me respondió que sí, que un cachorro no
representa una amenaza para perros adultos, pero ¿qué pasará cuando también sea
un adulto?, si es listo se irá a la cima de la pirámide jerárquica y si quiere
y no lo logra, seguro correría sangre por los pasillos.
A pesar que se mostraba inquieto y mordió mi
pantalón (ligeramente acampanado), como si fuera su juguete, y luego de haberme
mordido un poco las manos, la vendedora me dijo “es muy fiel y cariñoso, se adaptará
muy bien”.
Ella evidentemente quería su comisión por
los 21 mil pesos que costaba el animal, importado de Estados Unidos y
proveniente de un prestigioso criadero, aunque no es perro de exposición, me
aclaró
En este caso podemos ver que la vendedora
no tiene conocimiento sobre la importancia que representa adoptar o comprar a
un animal de compañía. De no saber lo mínimo que conozco sobre animales, porque
solo soy una periodista apasionada por
los animales y no una etóloga experta en el comportamiento animal, le habría
creído.
Esto nos demuestra que más que creer lo que
un vendedor dice, lo primero es buscar literatura seria sobre el animal que
queremos adoptar para conocer sus características generales, y no dejarnos
encantar por una tierna y linda carita, sino convivir un poco con el animal y
observar su temperamento.
El pinscher que conocí, de quedarse solo un
par de horas en casa, es capaz de destruirla toda y mordisquear lo que
encontrase a su paso.
Este es solo uno de miles de casos, para prevenir situaciones indeseadas, te invito a que hagamos consciencia y prefieras la adopción a la compra, pero cualquier opción que elijas, observa que el comportamiento y temperamento del animal que vas a integrar a tu familia sea compatible con
tus intereses y posibilidades. Estarás a su cargo entre 12 y 20 años.
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